La evolución de la cueca: de los salones aristocráticos al TikTok

La cueca, reconocida como danza nacional de Chile desde 1979, ha recorrido un largo camino que refleja los cambios sociales y culturales del país. Lo que comenzó como un baile de élite en salones aristocráticos del siglo XIX, hoy vibra también en las pantallas de TikTok, donde miles de jóvenes se atreven a reinterpretar sus pasos al ritmo de nuevos estilos musicales.

@rob.studiofotografia Un poquito de Cueca Pal 18 La consentida – Jaime Atria #cueca #piano #laconsentida ♬ original sound – robigles

En sus orígenes, la cueca se ejecutaba con gran formalidad. Las familias acomodadas la practicaban en reuniones privadas, acompañadas por guitarras y canto. Con el tiempo, la danza migró a las chinganas y ramadas populares, donde se mezcló con guitarrones, payas y vino en cacho. Esa democratización convirtió a la cueca en un baile transversal, capaz de unir a un país diverso en identidad y fiesta.

Durante el siglo XX, la cueca se consolidó como símbolo patrio. Surgieron variantes como la cueca brava y la cueca urbana, que llevaron sus acordes a bares, sindicatos y poblaciones. Autores como Los Chileneros o Nano Núñez defendieron su raíz popular, mientras otros grupos la acercaron a la modernidad.

Hoy, la historia vuelve a escribirse en las redes sociales. En TikTok proliferan coreografías que mezclan pañuelos con filtros digitales, remixes de cueca con trap y hasta competencias virtuales. Jóvenes creadores transforman el baile en un lenguaje nuevo, manteniendo su esencia pero adaptándola al mundo hiperconectado.

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La cueca, lejos de ser una reliquia, demuestra su vitalidad al atravesar épocas, estilos y generaciones. Desde el salón elegante hasta el scroll infinito, sigue cumpliendo su misión original: reunir a las personas en torno a un baile que celebra el encuentro y la identidad chilena.